un día me dixo mi compadre: por que cuando me ves que estoy a punto de cometer una pendexada* [que es muy a menudo], no me dices nada. A lo que yo en un ataque de sinceridad y espontaneidad respondí: caray! que hipócrita seria de mi parte hacerlo, que autoridad moral tengo para hacer semejante atrocidad [y perdernos tan memorables momentos?], el sonrió , asintió, y bebió.
2 comentarios:
Gracias por el comment,
este blog esta bien locochon, el intento de confundir esta presente, la gastronomía en su punto, el anonimato con letras en mayusculas, el vicio del pisteo sin dejar, el humo no esta presente y un taco pal jodido ingeniero es lo mejor..
saluttos
Publicar un comentario