jo.jo.

sin pizca de ironía, te digo adiós y gracias, dulce amiga, en verdad que me ha encantado el desenlace de nuestra historia, me hubiera gustado presenciarlo, ni hablar, aun así esa cereza en el pastel, esa hecatombe, ese beso que te "robó"[durante mil segundos] fue el mejor regalo de año nuevo. curiosamente pregunté por molestar sobre tu estadía en ese antro, creo que fue mi juego de tonos y mi histriónica seguridad las que abrieron el camino para tu agridulce revelación, que mas da que hiciste después, si durante tu relato se me fue dibujando una historia rosa de reencuentros y desencuentros. mi entusiasmo, poco entendible pero real, tus lágrimas por poco lo arruinan pero tu sinceridad lo enderezó, lo mejor fueron tus justificaciones, gracias a eso el motor de mi lápiz encendió y volví a disfrutar un cigarro como antaño.

jo jo